A mis 27 aun sigo empeñado en ver el mundo a mi manera, mi mundo, aunque digan que es todo lo contrario. Y es que ya no importa qué es sueño o qué es realidad, sólo importa que un momento determinado seas capaz de distinguir ambas cosas.
Se dice que se puede escribir un libro cuando hay una buena historia que contar, yo no tengo ni tuve ninguna buena historia, pero he habido y hay muchas historias que merecen ser contadas, aunque al final solo las lea yo. Ya no puedo estar sin contar, sin escribir, sin música tampoco sin mi familia, sin amigos, sin mis locuras de vez en cuando, no puedo vivir sin una ilusión que sea mi combustible.
Mi mundo es así, y este blog esta lleno de momentos que trato de plasmar para guardar y no olvidar, por que gracias a estos momentos que aun no termino me he formado, así entonces intento colar de vez en cuando homenajes para seguir alimentando mi recuerdo y sed de vivir.
Quiero vivir tantas cosas y contar tantas cosas que a veces parezco un niño frente a un papel blanco pidiendo sus deseos de navidad. Quiero hacer y disfrutar tantas cosas, felizmente aprendí de mi papa eso, que debo organizarme por prioridades, así ahora ya sé que cosas vale al pena hacer, ahora sé lo que soy capaz de hacer y aún así envenenarme a ratos sigue siendo un placer que no pienso dejar.
Termino, o empiezo, porque esto de los blogs es como vestir tu hoja en blanco, aunque nadie lo vea uno te sientes orgulloso de lo hecho; podrá pasar mucho tiempo, podrán existir las distancias, otras vidas, caminos opuestos, otros besos pero no olvidemos que siempre, nos mira la misma luna.
Se dice que se puede escribir un libro cuando hay una buena historia que contar, yo no tengo ni tuve ninguna buena historia, pero he habido y hay muchas historias que merecen ser contadas, aunque al final solo las lea yo. Ya no puedo estar sin contar, sin escribir, sin música tampoco sin mi familia, sin amigos, sin mis locuras de vez en cuando, no puedo vivir sin una ilusión que sea mi combustible.
Mi mundo es así, y este blog esta lleno de momentos que trato de plasmar para guardar y no olvidar, por que gracias a estos momentos que aun no termino me he formado, así entonces intento colar de vez en cuando homenajes para seguir alimentando mi recuerdo y sed de vivir.
Quiero vivir tantas cosas y contar tantas cosas que a veces parezco un niño frente a un papel blanco pidiendo sus deseos de navidad. Quiero hacer y disfrutar tantas cosas, felizmente aprendí de mi papa eso, que debo organizarme por prioridades, así ahora ya sé que cosas vale al pena hacer, ahora sé lo que soy capaz de hacer y aún así envenenarme a ratos sigue siendo un placer que no pienso dejar.
Termino, o empiezo, porque esto de los blogs es como vestir tu hoja en blanco, aunque nadie lo vea uno te sientes orgulloso de lo hecho; podrá pasar mucho tiempo, podrán existir las distancias, otras vidas, caminos opuestos, otros besos pero no olvidemos que siempre, nos mira la misma luna.
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